Las semillas de onagra producen un aceite rico en ácido graso gamma-linolénico (un omega 6), utilizado desde hace siglos en masajes y remedios tradicionales.
Ideal para las mujeres a partir de los cuarenta años y para todo tipo de pieles castigadas.
Un valioso aceite muy eficaz para combatir los efectos de la edad, que puede utilizarse por sus propiedades terapéuticas o como complemento en el contexto de una alimentación saludable.